¿Qué es el Blockchain?

Seguramente ya habrás oído hablar de este término o quizás no. Pero solo es cuestión de tiempo para que sepas cómo funciona. Se trata de un cambio de paradigma en nuestra forma de comprender el mundo digital. Los negocios pueden estar al borde de un cambio fundamental gracias a esta tecnología, y según dicen los expertos, no tardará en integrarse completamente en nuestras vidas.

Lo primero que debemos entender es cómo funciona el Blockchain. La cadena de bloques es una base de datos pública y distribuida, parecida a una base de datos relacional. Aquí los usuarios pueden registrar todas las transacciones sin que exista forma de modificarlas, ya que cada una de las partes de la cadena están marcadas y enlazadas temporalmente con el bloque anterior.

Todas las transacciones se conocen como bloques y éstos permiten tener un libro de contabilidad electrónico en el que muchos usuarios pueden participar de manera abierta y controlada. Ésto es posible porque cada uno de los bloques queda vinculado a ese usuario específico.

Si todo ese tecnicismo te parece complicado, pasemos al siguiente punto importante:

¿Para qué sirve el Blockchain?

Su principal labor es hacer posible la creación, manejo y comercio de criptomonedas. También es el responsable de brindar la seguridad por la que éstas son conocidas.

Permite a los monederos Bitcoin calcular su saldo gastable. Además hace posible la verificación de las nuevas transacciones, asegurando que el cobro se está haciendo correctamente. Aunque algunas cadenas de bloques requieren permiso de acceso, las cadenas de bloques públicas, como las de Bitcoin y Ethereum, son accesibles para cualquiera.

Su tecnología está basada en cuatro fundamentos:

  1. El registro compartido de las transacciones.
  2. El consenso para verificar las transacciones.
  3. Un contrato que determina las reglas de funcionamiento de las transacciones
  4. La criptografía, que es el origen de todo.

Todos estos principios pueden ayudar a gestionar de manera autónoma los intercambios de información entre los distintos participantes. Ésto lo convierte en una herramienta ideal para todo tipo de empresas e independientes.

Una de estas herramientas que ofrece es usar las cadenas de bloques como “contratos inteligentes” que se ejecutan directamente cuando se cumplen una serie de condiciones. Por ejemplo, los usuarios de Ethereum, deben cumplir una serie de requisitos predeterminados para probar que tienen esa criptodivisa y que tienen la autoridad para poder reclamarla.

Cada vez se gana más importancia dentro del mundo digital

Esta cadena de bloques será una herramienta esencial para el Internet. Nuestros aparatos electrónicos podrán comunicarse entre sí de forma segura y transparente. También la administración tendrá una baza incomparable con este sistema de criptografía. Cuestiones como la del voto electrónico que, a pesar de los intentos realizados con otras tecnologías, no ha resistido a los hackers. Ahora podría ser una opción viable para los usuarios con la seguridad de que su identidad no será suplantada, así como la comodidad de no tener que desplazarse hasta el colegio electoral.

Ésto es solo el comienzo. En un futuro bastante cercano, la tecnología Blockchain será algo a lo que estemos acostumbrados, ya que las ventajas que ofrece van a cambiar por completo la manera de operar de muchas industrias para mejor.

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